- Desde el Club House, por Charly Levi
Tras la euforia beisbolera que provocó la inauguración del moderno y funcional estadio “Centenario” durante los últimos días de febrero y prácticamente durante todos el mes de marzo de 1964, llegó la hora de la verdad para aquel conjunto que participaría en la recientemente creada Liga de Sureste, que ahora tendría como sede el nuevo escenario de la capital tabasqueña, aperturado el jueves 27 de febrero de aquel memorable año.
Los Plataneros de Tabasco, sucursal de los Tigres de la capital, propiedad del magnate de la industria eléctrica, Don Alejo Peralta y Diaz Ceballos, estaban listos para encarar la aventura de lo que sería su primera incursión como club tabasqueño en una liga profesional de importante nivel.
Los también denominados “Tigritos” de Tabasco, se llevarón el gallardete con record de 52-35, campeonato que ha quedado en el olvido de la memoria colectiva beisbolera de la entidad.
El acuerdo con la orgnización felina y la gerencia que manejaba el conjunto tabasqueño, gente de confianza de la administración de Carlos A. Madrazo Becerra, radicaba en que la escuadra capitalina aportara la mayor cantidad de peloteros de experiencia para poder enfilar al titulo a los Bananeros.
De esta forma, quien a finales de los años 70´s, fue el autentico descubridor de Fernando Valenzuela para las grandes ligas, el experimentado cubano Camilo “Corito” Varona, designado manager por los Tigres para la sucursal en tierras del sureste, contó con un gran plantel con jugadores de la talla de Celerino Sánchez, Benjamín “Chata” Cerda, Obed Plascencia, Hector Sañudo, además del inolvidable látigo zurdo de Comalcalco, José “Chamaco” Leyva.
Los Plataneros-felinos enfilarón al cetro al imponerse en la serie final a los Piratas de Campeche, dirigidos por Héctor Rodríguez, poderoso equipo que traía dentro de sus filas al cubano Pedro Cardenal, además de un discreto jugador que en el futuro sería uno de los pilotos más reconocidos del beisbol mexicano: Benjamín “Cananea” Reyes.
LIGA DEL SURESTE: RICA HISTORIA BEISBOLERA
Los Plataneros tuvieron un debut de ensueño al conquistar el campeonato en la primera edición de la Liga del Sureste. Lamentablemente a la salida de Carlos A. Madrazo del gobierno de la entidad, el apoyo y patrocinio para el conjunto vino a la baja, sin embargo les alcanzó, al mantener prácticamente la misma base del 64 para regresar a la final de circuito, esta vez para caer ante los mismos Piratas de Campeche, quienes cobraron venganza por lo sucedido un año antes. Para 1965 los Plataneros contarón con dos estelares lanzadores tabasqueños como Pepe “Chamaco” Leyva y Miguel Pereyra, serpentineros que años más tarde, lograrían historicas victorias en el parque del IMSS de la CDMX ante escuadras de grandes ligas, contando además con peloteros de la talla de Gregorio Acea, Arthur Burnett, Nicolas García, Celerino Sánchez y el panameño Elías Osorio, comandados esta vez por el venezolano Pompeyo Davalillo.
Tabasco se mantuvo dentro del circuito sureño hasta su extinción en el año de 1970, siendo lo más destacado durante las últimas ediciones de la liga, el que una gran cantidad de jugadores tabasqueños, utilizaran de plataforma el equipo de casa para proyectarse en dirección hacia la LMB.
Un día más, un día menos!