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El precio del alto rendimiento

  • En la opinión de Chelsea Guzmán

La temporada en las grandes ligas está próxima a arrancar, las redes sociales de los equipos empiezan a inundarse de contenido con los peloteros, mientras que las cuentas de los medios empiezan a hacer sus proyecciones del top 10 que habrá en cada posición para este 2024.

Cosa curiosa es que en estas listas, existe claro la de cuáles serían los lanzadores a seguir para esta campaña en la gran carpa. Gerrit Cole es de los favoritos y recientemente se prendieron (de nueva cuenta) los focos rojos en los Yankees debido a una molestia en el codo del pitcher estelar; una vez descartada la cirugía, se estima que regrese entre 1 a 2 meses.

En su momento Sonny Gray, quien había sido anunciado para ser el pitcher del juego inaugural con los Cardenales, no podrá estar en la lomita debido a un tirón en el tendón de la corva.

En los pitchers relevistas a seguir de cerca, figura el nombre de Devin Williams, el lanzador de los Cerveceros de Milwaukee se perderá tres meses de la temporada debido a dos fracturas por estrés en la espalda, y es entonces donde viene mi pregunta: ¿A qué se deben estas lesiones al cuarto para la hora? ¿Cómo estos atletas de alto rendimiento sufren de estas cosas siendo tan disciplinados?

En el caso muy particular de los lanzadores, podemos ver que la tendencia suele ser dada a tener físicos más delgados, de extremidades poco más largas, rápidamente pienso en Chris Sale, Jacob deGrom, Charlie Morton, Triston McKenzie, Tyler y Taylor Rogers. Son creo que pocos los pitchers que físicamente pueden parecerse al estilo del cubano Aroldis Chapman.
Y es ahí donde mi duda sale a relucir del porqué al tener físicos tirando a lo delgado pueden sufrir este tipo de lesiones: ¿Es debido a un sobrecarga de trabajo? ¿Falta de ejercicios de fortalecimiento y movilidad? ¿Es tal la cantidad de esfuerzo físico debido a la evolución del beisbol?

Pienso que la manera en la que el beisbol ha ido evolucionando y que aparentemente ahora 92 millas no son nada en la MLB, forman parte de las múltiples lesiones en los jugadores, el trabajo físico para ir a la par de la constante evolución y revolución que tiene la pelota tiene mucho que ver con las molestias que presentan durante lo largo de la temporada, que por cierto con sus 162 juegos tienen que salir todos los secretos para administrarse de la manera correcta para aguantar todos los juegos.

Si eso lo aterrizamos a la Liga Mexicana de Beisbol, una temporada que sí, es verdad, más corta pero con plazas como las de Tabasco, Campeche, Yucatán, Quintana Roo, Veracruz y compañía, el trabajo del cuerpo médico y trainers es fundamental para que los jugadores puedan aguantar el desgaste físico que hay debido a las temperaturas de los estados. Recuerdo Macuspana en 2022, llegábamos a temperaturas de 45 grados con un alto porcentaje de humedad y por lo tanto mayor calor, y si mi memoria no me falla, par de jugadores de 3 equipos salieron de los encuentros y la serie por golpes de calor y deshidratación.

Pero el beisbol, es así, una moneda al aire donde uno planea y muchas veces viene el diablo y lo descompone.

Nadie quisiera ver a ningún jugador lesionado porque aparte que nadie desea una lesión para ellos, todos los planes que se construyen entorno a un cuadro y una rotación que ya tienes casi definida; estos detalles te desarman aquella planeación que tenías. Pero dijéramos aquí, todo es parte del show.

Esperemos que todos los jugadores que están en lista de lesionados salgan pronto porque estamos a la vuelta de la esquina para que se cante playball.